Os habéis ganado todo mi cariño y mi respeto. Gracias por vuestra participación cada vez que os lo he pedido, gracias por hablar conmigo cada vez que os necesitaba, gracias por colaborar en las actividades, gracias por ayudar a vuestros niños en casa y trabajar con ellos, gracias por escucharme y dialogar conmigo y entre vosotros, y gracias por ayudarme a facilitar la realización de mi labor como maestra en el colegio.
No puedo estar más orgullosa de tener unas familias como las vuestras que se implican de esta manera en la educación de sus hijos. Y vuestros hijos bien orgullosos que también han de estar, al igual que vosotros de ellos.
Me quedaban algunos regalitos por agradecer por aquí, y no podía olvidarme de la preciosa sorpresa que me hicisteis el último día. Fíjate por donde, tenía yo ganas de tener un gadget de estos, y me leísteis la mente. Además, con un collage preparado y todo ¡qué más podía pedir!
Lucía y María C. también tuvieron el detalle de elegirle a la seño un conjunto precioso con la que está muy guapa ¡gracias!
Tampoco puedo olvidarme de los regalitos que he ido recibiendo durante el transcurso del curso. Son tantas cosas que no puedo decir mas que, para mí, cada día con mis alumnos ha sido un regalo.
Tarjetas dedicadas
Flores
Más flores
Bonitos dibujos
Billetes de 500€ (lástima que no fuesen de curso legal...)
También son preciosos regalos los mensajes escritos en las fichas
Y las cartas de amor...
Lo más bonito ha sido recibir todo el cariño que ha inundado nuestra clase:
Y sentir, sobre todo, que estos niños forman ya parte imborrable de mi experiencia vital:
Por todo esto y mucho más:
¡Gracias!
Seño Carla
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